Barcelona
El rediseño del Parc de l’Aqüeducte redefine la transición progresiva entre el Parque de Collserola y el barrio de Torre Baró, con el objetivo de permeabilizar el límite entre ambos espacios.
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ALCANCE DEL ENCARGO
Dirección de Obra
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CLIENTE
BIMSA
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PERIODO OBRA
Enero 2020 – Mayo 2021
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SUPERFÍCIE TOTAL
12.259 m²
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SUPERFÍCIE VERDE
5.760 m²
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PRESUPUESTO PEC (SIN IVA)
1,8 M €
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TIPOLOGIA
Urbanizació e Instalaciones deportivas
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TITULAR DEL ENCARGO
MASTERPLAN S. L.
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CONSTRUCTORA
ROGASA
Una parte fundamental del diseño se centra en la mejora de la gestión del agua, a través de una extensa zona de infiltración, que contribuye a reducir la carga sobre el sistema de alcantarillado.
En cuanto a su configuración, el parque ofrece una variedad de equipamientos acordados en colaboración con las entidades vecinales. Entre estos equipamientos se incluyen cuatro zonas de juegos infantiles adaptadas a diferentes edades, áreas con columpios, juegos inclusivos, barras de equilibrio y toboganes, así como una pista polideportiva equipada con dos canastas de baloncesto y debidamente señalizada.
Además, se ha habilitado un campo multiusos con superficie de arena para diversas actividades como fútbol, atletismo y eventos culturales, así como ocho pistas de petanca para el disfrute de los visitantes. Una zona social compuesta por cuatro módulos, que incluyen almacenes, un aseo doble adaptado y la sede social de la petanca, proporcionan un espacio de encuentro y organización para la comunidad.
El parque también cuenta con áreas de gradas cubiertas por pérgolas metálicas para ofrecer sombra, zonas de juegos bio-saludables, pasarelas accesibles con bancos y sillas para el descanso de los visitantes, así como amplias zonas ajardinadas con una variedad de árboles y arbustos. Además, se ha llevado a cabo la rehabilitación de las gradas existentes para mejorar su funcionalidad y estética.
Finalmente, se han instalado fuentes de agua, papeleras y estacionamientos para bicicletas, junto con nuevos cierres perimetrales que minimizan su impacto visual, integrándose de manera armoniosa con el entorno natural del parque. Este enfoque integral garantiza que el nuevo parque sea un espacio público inclusivo, sostenible y adecuado para el disfrute de toda la comunidad.